A un mes de las intensas discusiones en seis mesas temáticas sobre el impacto de la crisis en Haití, el Consejo Económico y Social (CES) se encuentra finalizando un informe clave que será presentado próximamente al país. Este proceso involucra la participación directa del presidente Luis Abinader y de los expresidentes Leonel Fernández, Hipólito Mejía y Danilo Medina, creando expectativas sobre el rumbo de la política nacional ante la crisis haitiana.
Mesas temáticas y retos del consenso político
Las mesas de discusión contaron con la presencia de 84 delegados y abarcaron temas como migración, comercio bilateral, desarrollo fronterizo, seguridad nacional, relaciones internacionales y asuntos laborales. Estas reuniones, realizadas entre el 22 de junio y el 22 de julio en la Universidad del Caribe (Unicaribe), se centraron en identificar desafíos y propuestas para enfrentar la delicada situación haitiana desde la perspectiva dominicana.
Desafíos en la aprobación del informe final
- Búsqueda de consenso: El texto necesita aprobación del presidente y expresidentes debido a su poder de veto.
- Medidas migratorias: El gobierno ha implementado acciones anunciadas en abril, desplazando el tema haitiano de la opinión pública.
- Obstáculos en debates: Cualquier avance requiere acuerdo entre los principales líderes políticos.
Puntos críticos: Mano de obra haitiana y atención internacional
La regularización de la mano de obra haitiana ha generado amplio debate, sobre todo por el interés de los sectores agrícola y de la construcción en facilitar la contratación de trabajadores haitianos. Sin embargo, partidos como la Fuerza del Pueblo y el PLD se oponen a lanzar un nuevo plan de regularización. Paralelamente, tras una cumbre entre autoridades, se enviaron comunicaciones al Consejo de Seguridad de la ONU para solicitar una mayor respuesta internacional a la crisis; aunque dicho órgano discutió la situación el 30 de junio, no adoptó medidas concretas para ampliar la ayuda a Haití.
El diálogo entre el gobierno y los expresidentes continúa como una apuesta para definir una respuesta nacional coordinada frente a la crisis haitiana. ¿Cuál consideras que debería ser la siguiente medida para abordar este desafío? Déjanos tu opinión en los comentarios o comparte este artículo con tus ideas.
